| SAE: SITIO DE APOYO EDUCATIVO. PLATAFORMA EDUCATIVA ABIERTA |
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| Revista Cognición 13 | |||
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Para citar este artículo Sánchez Arias, V., Hernández Galaviz, N., Contreras Paredes, J. (abril, 2008) SAE: Sitio de Apoyo Educativo. Plataforma Educativa Abierta. Revista Cognición Nº 13 ISSN 1850-1974 Edición Especial II CONGRESO CREAD ANDES y II ENCUENTRO VIRTUAL EDUCA UTPLoja, Ecuador SAE: SITIO DE APOYO EDUCATIVO. PLATAFORMA EDUCATIVA ABIERTA Víctor Sánchez Arias Norma Hernández Galaviz Jorge Contreras Paredes Centro de Alta Tecnología en Educación a Distancia CATED-UNAM MÉXICO Resumen El Centro del Alta Tecnología de Educación a Distancia (CATED) de la UNAM, preocupado por el desarrollo académico de estudiantes y docentes de las distintas instituciones educativas, versadas o no en el uso de tecnologías de información y comunicación (TIC), ha trabajado en la adaptación de plataformas educativas abiertas, como es el caso de Moodle, que coadyuven en el proceso de enseñanza–aprendizaje, en distintos contextos, complementando la relación pedagógica con el uso de recursos de Internet, con una visión encaminada al desarrollo de habilidades y actitudes para el estudio independiente, el trabajo colaborativo y el aprendizaje significativo.
Para citar este artículo Sánchez Arias, V., Hernández Galaviz, N., Contreras Paredes, J. (abril, 2008) SAE: Sitio de Apoyo Educativo. Plataforma Educativa Abierta. Revista Cognición Nº 13 ISSN 1850-1974 Edición Especial II CONGRESO CREAD ANDES y II ENCUENTRO VIRTUAL EDUCA UTPLoja, Ecuador SAE: SITIO DE APOYO EDUCATIVO. PLATAFORMA EDUCATIVA ABIERTA Víctor Sánchez Arias Norma Hernández Galaviz Jorge Contreras Paredes Centro de Alta Tecnología en Educación a Distancia CATED-UNAM MÉXICO Resumen El Centro del Alta Tecnología de Educación a Distancia (CATED) de la UNAM, preocupado por el desarrollo académico de estudiantes y docentes de las distintas instituciones educativas, versadas o no en el uso de tecnologías de información y comunicación (TIC), ha trabajado en la adaptación de plataformas educativas abiertas, como es el caso de Moodle, que coadyuven en el proceso de enseñanza–aprendizaje, en distintos contextos, complementando la relación pedagógica con el uso de recursos de Internet, con una visión encaminada al desarrollo de habilidades y actitudes para el estudio independiente, el trabajo colaborativo y el aprendizaje significativo. Un Sitio de Apoyo Educativo (SAE) representa una iniciativa para introducir las TIC en las instituciones educativas que emprenden proyectos en una modalidad de educación en línea. Sin embargo, el proyecto SAE no es exclusivo de instituciones que ya tienen la visión de una oferta educativa en la modalidad a distancia, sino también para aquellas que requieren estar a la vanguardia de la sociedad del conocimiento con el uso de las TIC en el proceso de enseñanza–aprendizaje (modalidad presencial). En ambos casos, se pretende el cambio de paradigmas y la puesta en marcha de estrategias de formación para el personal docente, administrativo y técnico. Palabras clave : Plataformas abiertas, Educación en línea, Entornos Virtuales de Aprendizaje, ELearning. Antecedentes En el ámbito de tecnología educativa para la educación a distancia, actualmente, existen muchas propuestas de los llamados Ambientes Virtuales de Aprendizaje, Plataformas para el Aprendizaje o Sistemas para la Administración del Aprendizaje (LMS – Learning Management System). Estas propuestas, tanto abiertas como cerradas, ofrecen entornos Web que automatizan algunos de los procesos de enseñanza y aprendizaje. La gran mayoría de estas propuestas están enfocadas a aspectos muy técnicos o administrativos, y pocas son desarrolladas bajo fundamentos pedagógicos que apoyen los procesos de planeación didáctica u optimicen los procesos de enseñanza y aprendizaje. Las plataformas Web para educación a distancia, en su mayoría, son desarrolladas para usuarios con perfiles técnicos específicos o planeadas para una institución determinada y con cierto conocimiento de los procesos de enseñanza–aprendizaje en los entornos virtuales. En la última década las instituciones educativas se han visto obligadas a introducir las TIC en sus procesos educativos, con la finalidad de mejorar la calidad, el alcance de su oferta educativa y ser competitivas. Creación de mediatecas con recursos diversos (audiovisuales, videos, discos interactivos, libros digitales, etc.), centros de cómputo, aulas de medios con acceso a Internet (multimedios) y a la red satelital, entre otras, son las acciones tomadas para estar competente con los avances tecnológicos. Epper y Bates (2004) destacan que administradores universitarios han perseguido las promesas de la tecnología aplicada a la educación: mejor enseñanza, mayor aprendizaje y menor costo mediante el establecimiento de redes, compra de ordenadores, instalación de software, inversiones en infraestructura, pero aún tienen el reto de incorporar la tecnología en el proceso de enseñanza–aprendizaje. El CATED encuentra imprescindible tomar en consideración las estrategias administrativas, presupuestales y tecnológicas para la efectiva implantación de sistemas de educación a distancia y en línea, además de visualizar un proyecto educativo que integre la formación de profesores para generar procesos de innovación educativa, tanto en el ámbito de la didáctica como del currículo, así como los procesos administrativos y de gestión académica y escolar. Para introducir las tecnologías en la educación de una manera paulatina pero decidida, el CATED ofrece una herramienta de apoyo a la docencia, donde las barreras de comunicación e información se subordinan a una necesidad de aprender en diferentes contextos. De esta manera, el CATED a través del SAE dirige su quehacer educativo al aprovechamiento de distintas aplicaciones para las modalidades presencial y en línea.
¿Qué es un SAE? El SAE es un ambiente virtual de aprendizaje implementado en tecnología Web, cuya finalidad es apoyar la cátedra presencial o a distancia, dando un seguimiento puntual al proceso de enseñanza–aprendizaje, a través de herramientas de información y comunicación que permitan a docentes y estudiantes, mantener una interacción interpersonal a distancia y una mayor interactividad con contenidos y materiales didácticos. Trabajar en un SAE implica mayor y mejor planeación curricular y didáctica, favoreciendo la flexibilidad para realizar actividades académicas de manera asíncrona además de tener acceso a mayores fuentes de información. Las actividades de aprendizaje y materiales didácticos son, prioritariamente, planeados y elaborados por el mismo profesor que imparte la clase, quien también se hace cargo de editar, actualizar y manipular el contenido de los materiales en el SAE.
Diseño pedagógico El modelo pedagógico del SAE se centra en la planeación del curso, proponiendo un currículo abierto y flexible que permita la mejora del proceso de aprendizaje, haciendo corresponsables de dicho proceso a los mismos actores: docentes y estudiantes, fomentando el estudio independiente, la colaboración entre pares y las iniciativas de mejora de los mismos procesos, en un ambiente virtual. Se parte de un concepto de aprendizaje que privilegia las acciones de los sujetos para arribar a un cambio cualitativo en los conceptos, mismos que se estructuran en esquemas y con los cuales el sujeto pasa de un estado de equilibrio, su posterior crisis o conflicto cognitivo y su transición a otro estado (Piaget, 1977). Este enfoque constructivista del aprendizaje otorga un papel activo tanto al estudiante como al docente (en tanto que aprende conforme a su propia práctica), puesto que la información que provee el docente a través del SAE es importante pero no suficiente para llegar al conocimiento (Hernández R, G. 1998), más depende de cómo se estructuren los contenidos y se definan las interacciones. El aprendizaje definido como un proceso continuo, inacabado, escalable, parte de los supuestos teóricos sobre los distintos tipos de aprendizaje que se dan en dicho proceso: aprendizaje social, significativo y por descubrimiento dirigido y autónomo. La teoría del aprendizaje social (Bandura, 1982, Vigotsky, 1979) postula que se aprende a través de las interacciones que se sostienen con el entorno. La teoría del aprendizaje significativo (Ausubel, 2002) sostiene que un alumno muestra una disposición para relacionar de manera sustantiva y no literal el nuevo conocimiento con su estructura cognitiva, siempre y cuando exista una estructura cognitiva previa, de ahí que se reconozcan dos tipos de aprendizaje: por recepción (esto dará cuenta de la selección cuidadosa de materiales, por parte de los docentes, que le sean significativos a los estudiantes) y por descubrimiento (que puede darse en la forma natural, autónoma, según las estructuras cognitivas del estudiante, o puede ser también por descubrimiento dirigido). Respecto a la enseñanza, se entiende como el proceso intencionado de propiciar el aprendizaje en los estudiantes, en este sentido el SAE es concebido bajo un enfoque de enseñanza flexible e indirecta donde el docente propicia situaciones para que el estudiante construya conocimientos o los descubra (Díaz-Barriga, F. 2002). El SAE “enseña”, “hace explícitas” las intenciones de los docentes, no sólo para facilitar el acceso a la información sino para monitorear el desempeño de los estudiantes y para proveer recursos que servirán de fuentes para el aprendizaje: los materiales didácticos (que proveen bases de información bajo una estructura definida por el autor de los mismos), la observación del entorno (la cual puede estar mediada por la misma tecnología, ejemplo: simuladores, entorno virtual), y la interacción con otras personas (el tutor, los compañeros, expertos, etc.) (Herrera B, L. 2002). Los conceptos discutidos hasta el momento se materializan en el SAE en forma de un currículo abierto, ya que se apela a la responsabilidad de los docentes: cuestionan sistemáticamente la enseñanza impartida por sí mismos, estudian el modo propio de enseñar, cuestionan y comprueban la teoría en la práctica mediante el uso de sus capacidades (Stenhouse, L.,1998). De esta forma, el SAE está organizado en módulos que permiten, por un lado, establecer las pautas de comportamiento de los estudiantes (programa), y por otro, proponer las actividades a desarrollar con apoyo de materiales didácticos y situaciones de comunicación interpersonal (tareas, recursos, foros y chat). Asimismo, se tiene un módulo para dar seguimiento al proceso de aprendizaje (monitorear el comportamiento y evaluar). Ofrece, además, un esquema para la organización de actividades que, gradualmente (y cronológicamente), van dando seguimiento al proceso de aprendizaje, bajo un esquema de reflexión en acción. Es posible en este esquema de organización, que conforme el docente detecte necesidades educativas en sus estudiantes, se replanteen actividades o se refuerce el aprendizaje adicionando actividades y recursos. Por tanto, el esquema de planeación educativa es flexible y autónomo, en el sentido de que el docente, en ejercicio de su libertad de cátedra, definirá los mecanismos e instrumentos para la impartición de su materia y evaluación del proceso de enseñanza – aprendizaje.
Diseño tecnológico El SAE es una plataforma educativa basada en el Software Moodle, pero no es Moodle. El SAE es un conjunto de adaptaciones cuyo objetivo ha sido, principalmente, mejorar la interfaz de comunicación visual de los programas en línea y ofrecer mayor flexibilidad en su implantación desde su diseño didáctico. El SAE es un sistema de educación basada en Web (SEBW), que transita de la segunda generación a la tercera, en función de que se promueve la administración de un curso en línea, se controla el proceso de aprendizaje, se facilita el acceso a contenidos educativos, se registra el desempeño del educando y se controla la asignación de tareas (Peña A, A, 2004), pero aún se encuentra limitado el empleo de materiales multimedia, y no por carecer de infraestructura, sino por el trabajo que implicaría para los docentes y las instituciones, en que debieran fortalecer sus competencias educativas e incorporar otros perfiles a los equipos de trabajo académico: programadores y diseñadores Web. Por otro lado, con el SAE se pretende reducir la carga administrativa de los docentes, permitiéndoles organizar su trabajo con mayor eficacia y capacitándoles para reflexionar sobre su propia práctica y detectar nuevas necesidades educativas de sus estudiantes (Scheuermann, F., 2003).
Implantación del SAE El diagrama 1 muestra las acciones que tanto docentes, administradores y diseñadores gráficos, deben realizar para la planeación, diseño y puesta en operación del o los sitios de apoyo educativo. Como se dijo anteriormente, el docente o tutor toma un papel protagónico en la implantación del SAE ya que a partir de la planeación de su curso, dará las pautas para la creación de SAE´s. Una vez instalado el sistema del SAE (Administrador) y editado (Docente y eventualmente por el diseñador gráfico), se procede a dar acceso a los estudiantes, quienes tendrán interacción con los contenidos de acuerdo a las propuestas diseñadas por el docente. Prácticamente, durante el curso (diagrama 2), la actividad en el SAE recae en los protagonistas del proceso de enseñanza – aprendizaje, y sólo en casos necesarios, la participación de un administrador del sitio para dar soporte técnico y también para monitorear el comportamiento del grupo.
Perspectivas de uso El SAE propone un ejercicio de iniciación para elevar la capacidad de uso crítico y creativo de las TIC para generar ambientes innovadores de aprendizaje, sin embargo, no depende directamente de ello para potenciar el aprendizaje, sino de la concepción global del quehacer docente, en cuanto al dominio de su materia y las teorías que sustentan su práctica, y a partir de esto, optimizar los recursos, tiempos y medios para favorecer el aprendizaje de los estudiantes. Con el uso del SAE se pretende que las instituciones educativas tengan la posibilidad de ampliar los espacios de reflexión tanto individual como grupal con las herramientas tecnológicas de comunicación e información necesarias para el proceso de enseñanza– aprendizaje, además de ofrecer a docentes y estudiantes una alternativa de comunicación y distribución de recursos digitales propios de sus asignaturas y metodologías. Por otro lado, los docentes tienen la oportunidad de identificar los recursos tecnológicos y servicios de información y comunicación con que cuenta el SAE y su potencialidad para desarrollar estrategias de enseñanza–aprendizaje cada vez más innovadoras y efectivas; analizar y reflexionar acerca de la incorporación de las tecnologías en el aula y más allá de ésta y construir sus propias propuestas de incorporación, sin limitarse a una transmisión de conocimientos. El SAE propicia la programación oportuna y flexible de la enseñanza, considerando tiempos para abordar cada una de las unidades temáticas del programa y, a la vez, el ritmo de trabajo y aprovechamiento de las herramientas por parte de los alumnos. Las perspectivas de uso del SAE son variadas, en tanto que en este, los docentes pueden ofrecer a sus estudiantes recursos de apoyo, tales como contenidos digitales, plan de actividades, y espacios de discusión y trabajo colaborativo (foros de discusión y Chat) que enriquecerán el proceso de aprendizaje; además de dar seguimiento del proceso de enseñanza–aprendizaje utilizando herramientas para el control de calificaciones. Esencialmente, los estudiantes, con la asesoría pertinente, contarán con un espacio de consulta y comunicación con sus docentes y sus pares, para potenciar su aprendizaje, además de mantener una comunicación más estrecha, en un ambiente virtual. Tendrán la posibilidad de integrarse en grupos de trabajo (fuera del aula, si es el caso) para un aprendizaje significativo y de reflexionar sobre su proceso de aprendizaje y sus logros, mediante herramientas para la recopilación y organización de información, mediante la incorporación del e-portafolio.
Ventajas en su versión 1.0 La versión 1.0 del SAE tiene las siguientes ventajas:
Desventajas en su versión 1.0 Derivado de la puesta a prueba del SAE y la retroalimentación de expertos, se ha encontrado que:
Conclusiones Existen muchas alternativas para implantar tecnología en la educación, tanto presencial como a distancia, sin embargo, pocas veces se piensa en el proceso de transición de aquellas instituciones que incursionan en el uso de dicha tecnología o en los factores clave para que el proceso de enseñanza–aprendizaje sea efectivo. Al observar y probar distintas estrategias pedagógicas para la efectiva aplicación de la tecnología en la educación, el CATED ha encontrado factible desarrollar herramientas que apoyen los procesos de enseñanza-aprendizaje. Una de las herramientas desarrolladas es el Sitio de Apoyo Educativo, un ambiente virtual que ofrece, entre otras alternativas, la posibilidad de que el tutor asuma el control de un curso, y decida sobre el momento en que delegará este control a los estudiantes para favorecer el aprendizaje. También mediante la planeación y desarrollo de un curso, se posibilita una reflexión sobre la acción, teniendo oportunidad de autoevaluar, mejorar y corregir los aspectos de su práctica docente, y, a la vez, una mejor apreciación del trabajo de los alumnos, siempre y cuando su planeación de actividades y el desarrollo de una verdadera tutoría le permita detectar necesidades de aprendizaje. Una vez que el docente conoce las herramientas con que cuenta el SAE, se enfrenta a nuevos retos y a la necesidad de requerir más elementos para orientar el proceso de enseñanza–aprendizaje. Por lo que actualmente el CATED en colaboración con administrativos y académicos de la Coordinación de Universidad Abierta y Educación a Distancia están trabajando en el análisis y diseño de una segunda versión del SAE considerando lo siguientes aspectos:
Referencias Ausubel, D. (2002). Adquisición y retención del conocimiento: una perspectiva cognitiva. Barcelona: Paidós Bandura, (1982). Teoría del aprendizaje social. Madrid: Espasa: Calpe. Díaz-Barriga, F. (2002). Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. México: McGraw-Hill. Epper, R. M. y Bates, A. W. (2004). Enseñar al profesorado cómo utilizar la tecnología. Buenas prácticas de instituciones líderes. Barcelona: Editorial Fundación UOC. Hernández Rojas, Gerardo (1998). Paradigmas en psicología de la educación. México: Paidós. Herrera B., Lorenzo M. A. (2002). Las fuentes de aprendizaje en ambientes virtuales educativos. Revista Reencuentro. México: Universidad Autónoma Metropolitana – Xochimilco. Diciembre, no. 035, pág. 69 – 74. Peña A., A. y Sossa A., J. H. (2004) Educación basada en Web: un estado del arte. Ponencia en el XX Simposio Internacional de Computación en la Educación. Puebla, México, disponible en: http://www.somece.org.mx/simposio2004/memorias/grupos/archivos/069.doc Piaget, J. (1977). Psicología y pedagogía. Barcelona: Ariel Scheuermann, F. (2003). Aspectos pedagógicos de la enseñanza y el aprendizaje en la Red. En Barajas F., Mario (2003). La tecnología educativa en la enseñanza superior: entornos virtuales de aprendizaje. España: McGraw – Hill. Stenhouse, L. (1998). Investigación y desarrollo del curriculum. Madrid: Morata. La tecnología abierta se refiere a aquella que se basa en software de código abierto y software libre bajo estándares abiertos y la tecnología cerrada se basa en software propietario y esta puede adoptar estándares abiertos o cerrados. Moodle es redistribuido y/o modificado bajo los términos de la Licencia Pública General GNU (GNU General Public License o GPL) según han sido publicados por la Free Software Foundation.
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